El Bañuelo - Carrera del Darro 31.
Se halla, este baño en una de las zonas más privilegiadas de Granada: La Carrera del Darro.
Es conocido también como Baño del Nogal (Hamman al Yawza) o de los, Axares, haciendo alusión este último al nombre que tenía el barrio cuando se construyó: Barrio de los Axares -de la Salud o Deleite- muy elogiado por los poetas musulmanes, tanto por su clima como por los bellos edificios que en él se encontraban, siendo sus límites el puente del Cadí, la puerta de Guadix (situada al final del Paseo de los Tristes) y la calle San Juan de los Reyes.
Los baños proliferaron por todo el territorio de Al-Andalus, no sólo en los núcleos urbanos, sino también en los males -grandes o pequeños -, por lo cual se deduce la importancia que para los musulmanes -andalusíes-, tenía el agua que, en el caso del baño, alcanzaba un doble objetivo: la limpieza corporal y espiritual. Como en la religión cristiana, el agua era un símbolo de purificación, limpieza de los pecados y regeneración. Por ello, tras él se liberaban de aquellos actos realizados contra los preceptos del Corán. Nos hablan también, los baños de la pulcritud del pueblo musulmán, como así testifica el gran Poeta Ibn al-Jatib, en contra de la opinión de otro poeta también de la época, Ibn Jaldum, que consideraba descuidadeos a los habitantes de los núcleos rurales.
Para el abastecimiento del agua a la ciudad los musulmanes construyeron una importante red hidráulica, tomando sus aguas de ríos (Darro, Beiro y Genil) así como de los numerosos manantiales que brotan en los alrededores de Granada, concretamente el barrio de los Axares las tomaba del río Darro.
Aparte de los privados, el Hamman: (baño) era un edificio público, cívico y, en cierta medida religioso. Los habitantes del barrio acudían al baño para lavarse, cortar el cabelo, depilarse, recibir masajes, además de servir como lugar de reunión. Había un horario distinto para hombres y mujeres, éstas abandonaban el hogar sólo para las visitas semanales a los cementerios y para asistir una o dos veces al mes al baño, además allí solían realizarse los preparativos de la novia para la boda.
Los árabes heredaron la tradición de las termas romanas de Bizancio y Roma a través de las ciudades del Próximo Oriente y Norte de África, pero redujeron las dimensiones y estandarizaron el tramo de la planta. El concepto de las termas